Los calvos cumplen una labor social. Si bien ahora, debido a la expansión del móvil, han perdido parte de su eficacia, aún preservan su principal función: la geolocalización visual. Si te encuentras en un acto multitudinario y quieres localizar a alguien, incluso aunque ya estés conectado a través del móvil con esa persona, un calvo es una referencia incuestionable…
«¿Dónde estás?»
«Arriba hacia la izquierda, al lado del calvo»
Reivindico el calvo hasta el punto de que si en un concierto, por ejemplo, no ha habido ningún calvo que haya comprado una entrada, la organización debería instalar aleatoriamente un número razonable de calvos hinchables para el mejor funcionamiento de todo. Digo.
IMAGEN – (Perfecta Organización de Calvos en un Evento Público)
Echo & The Bunnymen, «Scissors in the sand»